Por Benito Insúa
La República Popular China resulta el principal destino de nuestra carne de exportación frente a un decrecimiento de compras de la UE, hoy en el foco de la pandemia.
Como todos ya sabemos la ganadería es formadora de precios por un lado y formadora de la ecuación económica de los sistemas mixtos que se combinan con la agricultura, sobre todo en nuestra Pampa Húmeda. En esta secuencia sigue habiendo buenas noticias para la ganadería vacuna, felizmente arrastrada por una demanda internacional muy sólida, que se ve con muy buenos ojos por los frigoríficos exportadores de la Argentina que están trabajando en sus plantas a un muy buen nivel.
Estos buenos indicadores tienen desde hace 3 años a los chinos como los grandes compradores de proteínas animales o proteínas vegetales para carne. Son ellos los que movilizan a los grandes países ganaderos como el nuestro, Brasil y Estados Unidos. Detrás han quedado como compradores los países integrantes de la Unión Europea, hoy complicados por la pandemia. De esta manera y según el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) la República Popular China resultó el principal destino de nuestra carne de exportación, en volumen, para la carne vacuna argentina durante los primeros once meses del año 2020, con aproximadamente 425 mil toneladas, seguido por Chile, 29,3 mil toneladas, y luego por Israel, 24,7 mil toneladas. En cuanto al valor de las divisas ingresadas, el principal mercado durante el periodo también fue China, que representa un (63,3%) del valor total exportado de carne vacuna enfriada, congelada y procesada en el periodo, seguido por Alemania (7,5%), Israel (6,8%), y Chile (6,6%).
Datos IPCVA.
