Este acuerdo marca un camino a seguir en otras zonas del país donde la conflictividad continúa. Aquí luego de 25 años el campo cambió de inquilinos, se instaló una empresa local de semillas para forrajes y se implantarán cientos de álamos como cortina forestal.
La preocupación de algunos vecinos de los barrios San Carlos, Real, Moya y Jardín, adyacentes al Parque Natural Laguna de Gómez, sobre la aplicación de fitosanitarios en un campo lindero a viviendas encontró una solución que vino del lado de donde tenía que venir: el sector productivo.
En este sentido fue fundamental la intermediación de la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín (AIAJ) que logró que luego de 25 años el campo que venía siendo denunciado por los vecinos por las aplicaciones de fitosanitarios cambie de inquilinos, descomprimiendo así las tensiones entre las partes. El campo será ahora puesto en producción por una empresa local que se dedica al desarrollo de semillas forrajeras.
Además, tomará otra faceta productiva: será implantado por cientos de álamos que servirán como cortina forestal, donados por el municipio de Junín e implantados por los ingenieros de la AIAJ. Este sábado 3 de septiembre se implantaron los primeros 400.
Forrajes: Cómo lograr el éxito para su implantación y producción
“Este es un tema que venimos trabajando desde hace más de un año y en el que la AIAJ ha cumplido un rol fundamental uniendo las partes a través del cumplimiento de la Ordenanza municipal actual, la búsqueda de eficientizar los controles con la figura del fiscalizador y el objetivo de producir siempre bajo las normas que abarcan a las Buenas Prácticas Agrícolas”, expresaron desde la Asociación.
“Esta es una gran noticia, muy importante para toda la comunidad de Junín. Y es una muy buena noticia también para otras regiones donde continúan los conflictos y la falta de consensos sobre el uso de fitosanitarios en zonas linderas a localidades o poblaciones”, explicó el presidente de la AIAJ, Aimar Pena.
Pena resaltó también que desde la entidad “llamamos a que se continúen realizando los controles en las habilitaciones para nuevas urbanizaciones y en los controles a las aplicaciones”.
Para la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín el camino es continuar insistiendo con el objetivo de producir alimentos de manera responsable con el medio ambiente y las personas.
En ese sentido la AIAJ es una de las voces más capacitadas técnicamente para brindar información que contribuya con sustento en el debate sobre el uso de fitosanitarios para la producción agropecuaria en zonas cercanas a la urbanidad y en la discusión sobre las llamadas franjas verdes.