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A 200 años de la muerte de Güemes, se enaltece la figura del Gaucho

“Los infernales”, así llamaban a los aguerridos gauchos norteños, que de gran valor y coraje fueron guiados por Martín Miguel de Güemes para resistir el avance español en la inmensa frontera norte de nuestro país.

¿Quién los bautizó como gauchos en tiempos donde esa condición solo era aparentemente la de aquellos hombres de a caballo que recorrían las llanuras pampeanas? A estos hombres que vivían lejos de los montes y de los cerros salteños donde ya se rumoreaba sobre una “guerra gaucha” que desmembraba a las tropas realistas con sorprendentes proezas guerrilleras. Sin embargo por los pagos donde el sol caía en el horizonte, muchos gauchos solitarios y sin más patrimonio que su pingo y su facón, recorrían sin reparo las latitudes de la incipiente Nación Argentina. Sin dudas entre unos y otros, gauchos del norte y del sur, había mucho más en común que caballos y ponchos, porque los atravesaba una causa, un ideal, un sueño: ser independientes y gozar de la libertad anhelada, palabras que resonaban desde las entrañas hasta el alma en cada uno de estos gauchos sin fronteras, pero unidos por la tierra que los vio nacer.

Cuanta verdad hay en estas palabras

Cuentan por ahí en relatos tradicionales que corren de boca en boca, que Güemes escuchó en la voz de San Martín, nombrar a los valientes hombres de sus tropas como “gauchos de admirable coraje”.  Así fue como Don Martín Miguel decidió que aquel adjetivo sería un título de honor que los representaría eternamente, alcanzando también una proyección heroica al vocablo. De esta manera fue el comienzo del cambio semántico del significado de gaucho, que hasta ese momento designaba así a los vagabundos aventureros del ambiente rural, nacidos en un hábitat marcado por la colonización y consecuencia de la introducción de los ganados que pronto se volvieron cimarrones.

Así en territorios de escasa o casi nula población, comenzaba a desarrollarse la cultura augural que fue transformando en criollos a los hijos de esta tierra americana, encuentro de pueblos nativos y colonos, que sin dudas dieron como frutos esos gauchos del norte y del sur, del este y del oeste y que, como bien asegura la destacada especialista en la ciencia folklórica argentina Olga Fernández Latour de Botas, “El gaucho será el sujeto axial de la sociedad rural rioplatense por lo menos durante dos siglos”.

Sin dudas podemos agregar y afirmar que el gaucho también fue protagonista indispensable en la lucha revolucionaria de los ejércitos independentistas que lograron llevar adelante innumerables batallas frente a los constantes intentos de abatir la causa patriótica. El Ejército de Observación sobre el Perú, a cargo del General en Jefe Martín Miguel de Güemes, integrado por los Gauchos Infernales, en las más difíciles adversidades de aquellos tiempos tan turbulentos, logró gloriosas victorias marcando con honor nuestra historia y la de muchos pueblos hermanos americanos.

El legado del Patriarca del Folklore

A 200 años de la muerte de Güemes, vanguardista de la Patria, el único General Argentino que murió en acción de guerra, el primer Gobernador de Salta elegido por el pueblo, el gaucho por convicción que renunció a sus privilegios por ver a sus compatriotas libres, el hombre honesto que inculcaba en su gente los valores de la causa patriótica y mucho más, nos legó su grandeza, su valentía, su ejemplo de entrega y compromiso con los ideales revolucionarios de Mayo.

Como héroe de la Patria hoy y siempre lo recordamos conmemorando el Día de la Libertad Latinoamericana en su memoria, reconociendo y valorando a aquellos bravos gauchos infernales que lo acompañaron con adoración y fidelidad, a quienes minutos antes de morir y con su último aliento, el 17 de Junio de 1821, Güemes les hizo jurar no aceptar jamás tregua alguna con el ejército invasor, y dar la vida antes que permitirles volver a pisar este suelo americano.

Por los gauchos salteños como los infernales de Güemes, por los gauchos sureños de las llanuras pampeanas, como aquel Martín Fierro que Hernández inmortalizó en su obra, por todos los gauchos que fueron, son y serán los hombres argentinos que enaltecen nuestra historia, porque fueron ellos quienes forjaron esta Patria… Por todos ellos, no olvidemos nuestro pasado, y comencemos a reconocer que hubo también mujeres muy valientes, corajudas de armas tomar a quienes bien les cabe la condición de gauchas porque lucharon a la par de estos hombres y no se les ha dado aún el merecido lugar en la historia, es una deuda que hoy comienza a saldarse… 

Por María Eugenia Alvear
Profesora de Historia y de Folklore