Nuestro especialista Matias Senigagliesi alerta esta vez sobre la eficacia de los microgranulados junto a los líquidos con nano tecnología.
En la región agropecuaria argentina, donde se produce la mayor suma de granos, cereales, carne y leche el balance promedio de nutrientes es negativo, siendo superior la extracción que la reposición.
Dicho indicador, conocido por asesores y productores, hizo crecer de manera exponencial la utilización de fuentes de fertilizantes diversas y en los últimos años se le sumo la demanda de enmiendas, para mejora de suelos.
Hoy existe una propuesta adicional que son los microgranulados, junto a los líquidos con nano tecnología, que permiten aumentar la eficacia combinándolos con los de uso habitual.
Los mismos, tienen varias ventajas, como ejemplo son más balanceados que los tradicionales, son eficientes porque se absorben más fácilmente, no tienen pérdidas por polvo y son poco higroscópicos, y permiten perfeccionar la autonomía de siembra.
Son más balanceados, ya que contienen 4-5 nutrientes, en cambio los tradicionales 1 a 3. Por ejemplo Nitrógeno, Fósforo, Azufre y Zinc y un Super Fosfato Triple sólo Fósforo.
Se absorben fácilmente porque se pueden aplicar junto con la semilla en la misma línea de siembra, quedando muy cerca de las raíces y en mayor cantidad, sin generar toxicidad, como si puede ocurrir en las fuentes amoniacales.
Como las dosis son 4-5 veces más bajas que las formas comúnmente aplicadas, optimizan la logística (con una camioneta se puede llevar la cantidad de bolsas para hacer unas 40 has) y permite sembrar una superior cantidad de has, sin cargar los equipos.
Como corolario, lo ideal sería realizar los análisis de suelo pertinentes y en función de sus resultados, armar un plan de mediano y largo plazo, para que la regeneración de nutrientes sea superior al usufructo, combinando todas las fuentes, ya que son complementarias porque llegan de diferentes formas y momentos al suelo (principal recurso).
Todo ello, junto a las rotaciones y buen uso, generaran un círculo virtuoso, que contribuirá a la resiliencia y sustentabilidad del sistema productivo.